Él puede hacer lo que quiera en mi ausencia, no me importa. No me interesa saber con quién tiene sexo, menos tengo ganas de ser su próxima víctima en la cama. A penas puedo aguantar que me bese frente a nuestros padres.

No digo que sea feo, Hans es uno de los alfas más hermosos y codiciados de Alemania. Pero su mala personalidad lo estropea todo. Como su secretario, se lo sucio que es y lo hijo de puta que puede ser. Al inicio, cuando me manifesté como omega, sentí la asquerosa atracción, pero los sentimientos murieron de inmediato por alguien tan desagradable. Aún si es mi futuro esposo, de ninguna manera voy a amar a ese hombre que me usa para llenar sus bolsillos.

Ni siquiera quiero pensar en el día que esté completamente preso, obligado a tener su descendencia. No tengo deseos de compartir mi celo con su rut, prefiero que sea por inseminación artificial. Después de la última que intento acostarse conmigo espero haya entendido como son las cosas y respete mi voluntad hasta el final de esta alianza.