Cuántas veces me hizo sentir que yo era el culpable de que nuestra relación fracasara...
Me sentí pequeño e indefenso, no pude defenderme. Sentía miedo pero no tenía las fuerzas suficientes para alejarlo de mí, y sin darme cuenta, Jae Hyun me estaba llevando con él en contra de mi voluntad a la salida de mi trabajo. Mi alma volvió a mi cuando del otro extremo Young Soo tomó mi mano con esa firmeza que yo necesitaba. Aun cuando me sentía algo protegido, yo no estaba ahí del todo y en mi cabeza solo retumbaba todos los gritos y reclamos que Juyeon me había hecho.
-¿Quién eres? ¿qué crees que haces? -cuestionó Kim en un tono tranquilo pero con una seriedad que podía intimidar a cualquiera que no lo conociera.
-Soy el novio de Yun, y me lo llevo conmigo. ¿Quién mierda eres tú? -El agarre de Young Soo se sintió más débil pero pronto volvió a apretar mi mano sin hacerme daño. Él sabe que algo no está bien aquí.
-Soy su jefe y no puedes llevarte a mi empleado así como si nada. -volvió a hablar con su firmeza inquebrantable.
-¿Acaso necesito pedirte permiso? Esta mierda de empleado que tienes se viene conmigo ahora. -mi corazón dolía y no porque lo amara, sino porque siempre creía las cosas que me decía.
-¡Ja! Por supuesto que no. -Young Soo me jalo para apartarme del agarre de Jae Hyun y me protegió dejándome detrás suyo, pero aun así pude ver como empujaba a mi ex novio queriendo sacarlo del local. -Vienes aquí, interrumpes mi cafetería en el horario laboral de Yun e interrumpes su vida cuando él no quiere ir contigo.
-Pero que demo... ¡No puedes echarme así! -se alteró Jae Hyun queriendo golpear a Young Soo, pero este tomó ese puño que quiso impactar contra su rostro y, sinceramente no se que tanta fuerza tiene Kim pero por la expresión de mi ex pude notar que mi jefe si se ejercita duro. -¡Volveré por él de todos modos! ¡No puedes escapar de mí, zorra! -ese último grito retumbó en mi mente.
-¡No te atrevas a insultar a Yun enfrente de mis narices! ¡Ahora es mi novio así que espero no vuelvas a aparecer por aquí si no quieres que te haga pedazos, basura humana! -sentí el enojo de mi hoobae sin embargo, él no me asustaba y me sentí mejor cuando Jae Hyun se fue aunque siquiera tuve el valor de mirarlo.
Mi cuerpo estaba temblando demasiado, no podía controlarlo, pero no todo era tan mierda en mi vida, porque gracias a los astros Young Soo estaba conmigo. Me llevó al vestidor de los empleados disculpándose en el camino con los clientes que tuvieron que presenciar aquella escena desagradable. Ju Won iba a encargarse de todo, o al menos eso oí que le decía a Young Soo antes de que nosotros nos encerráramos en esa pequeña habitación.
Una parte de mi tenía miedo de ser despedido, pero otra parte se sintió en paz, y más aún cuando me vi envuelto en la calidez de Young Soo. Normalmente rechazó el contacto físico pero su abrazo me devolvió esa estabilidad que tanto estaba necesitando y mi corazón alterado comenzó a latir con más tranquilidad. Se sentía cálido, se sentía bien, me sentía bien.
No me cuestiono y solo me sostuvo.
No me juzgó, y empatizo con mi corazón.
Luego de beber el té que Ju Won preparó para mí, pude recomponerme y tuve el instinto de volver a trabajar pero Young Soo se negó a que siguiera con mi jornada laboral. Estaba avergonzado por eso, se que hice todo un desastre ahí afuera pero...
-Tómalo con calma, sunbae. Se nota que necesitas descanso. -Young Soo me habló en un tono suave lleno de preocupación, acariciando una de mis mejillas con tal delicadeza que me hizo sentir extraño porque nadie a parte de mis amigos me tocó de ese modo como si yo fuera importante en el mundo.
-Yo... realmente lo siento por todo. -me sentí abatido. -creo... creo que no podré seguir trabajando aquí, yo... él volverá y... -otra vez me estaba alterando. -Él es muy malo, no... no voy a meterlos en problemas, es un tipo violento y... no... no debo volver... -mi cuerpo volvió a temblar, iba a colapsar si seguía pensando en ello pero no podía detener mis malos pensamientos.
-No, no, nosotros cuidaremos de ti, Yun. Tu no eres una carga para Blue Moon y no traes problemas. ¿Sabes? Eres mi amigo, eso te hace especial, yo no puedo perderte. Y ya se lo que dirás, que hay muchas personas capaces para este puesto de trabajo pero yo te quiero a ti y si me necesitas estaré aquí.
-¿De verdad?
-Claro que sí... así que si quieres puedo acompañarte hasta tu casa ahora. -dude un poco, no quería ir a mi casa aun.
-Pero...
-Pronto vendrá Sakura, no te preocupes, puedo dejar a Ju Won solo un momento.
-Y si mejor...¿espero a que se termine tu horario? -pregunté aquello último con pudor, no me gusta ser fastidioso pero quería quedarme.
-Pero se hará muy tarde mh... a menos que quieras quedarte en mi casa, vivo solo así que nadie va a molestarte. ¿Qué dices? -se oía emocionado y eso me dio seguridad. -De paso podemos hablar si así lo necesitas o puedo quedarme callado, aunque... sabes que no se me da muy bien mantenerme en silencio.
-Okay, me parece perfecto. -acepte rápidamente con una sonrisa, no se porque me sentí tan feliz como si él me estuviera invitando a una cita cuando solo me estaba invitando a su casa como su amigo y probablemente por lastima.
Las horas pasaron y el reloj tocó las 9 PM, eso significaba que se estaban preparando para el cierre. Me molestaba estar sentado esperando, entonces intenté ayudar pero ni Sakura ni Young Soo me dejaban moverme de donde estaba. Si bien Sakura no presenció nada de lo anterior, por actitud pude notar que estaba al tanto de todo. No creo que Young Soo lo haya dicho, más bien creo que fue Ju Won pero no me siento enojado por ello.
Cuando faltaban 20 minutos para las 10 PM ambos se fueron de Blue Moon y solo quedamos Young Soo y yo. Como de costumbre él se quedaba un poco más para hacer cuentas y ese tipo de papeleo que no entiendo muy bien. No podía dejar de mirarlo ansioso esperando a que terminara, me mataba de ternura notar que él se estaba apresurando para poder irnos a su casa pronto.
-Oye sunbae, ¿quieres tomar algunos pasteles? Para llevar a mi casa...
-¿Eh? ¡Oh, si! ¡Por supuesto! ¿Cuál te gustaría que tome? -no estaba seguro de cuál es su favorito.
-El que tú elijas será el que me guste a mi. Ve, ve, tranquilo, no soy nada quisquilloso. -me animó.
Quise quejarme por su respuesta pero después de todo lo que hizo por mi lo menos que podía hacer era obedecer y dejar de ser una piedra en el zapato. Colgué mi bolso en uno de mis hombros y me acerqué al mostrador para tomar una variedad de cuatro porciones de pasteles. No estaba muy seguro de los gustos que le gustan a Young Soo por eso preferí llevar un poco de todo. Entonces en la bolsa para llevar guarde una porción de carrot cake, oreo cheesecake, red velvet cake y por último una de chocolate. Para ser honesto, de todas las que tome solo me gusta la de chocolate pero podría probar de las demás por Young Soo. No me voy a morir por acompañarlo en lo dulce un día.
Tan pronto como terminé de guardar nuestros postres de esta noche, él se acercó a mí para avisarme que ya podíamos ir a su casa. Me advirtió que no vive muy lejos de la cafetería y que muchas veces prefería ir caminando, por eso no traía su automóvil. Creo que se sintió apenado por hacerme caminar, pero la noche primaveral estaba perfecta y me ayudó a relajarme luego de haber tenido un día tan duro.
Al inicio había mucho silencio y me sentí raro porque sabía que él acostumbra a hablar demasiado, no sabía cómo romper la tensión y al mismo tiempo deseaba disculparme por los inconvenientes que le cause a él y a Blue Moon.
-Yo... realmente lamento todo lo que pasó hoy. -solté mezclado con un suspiro lleno de remordimiento.
-No te preocupes... agradezco haber estado ahí. -me consoló mirándome de reojo.
-¿Sun Hee te contó algo?
-No... bueno, sí pero... -lo miré arqueando una de mis cejas. No estaba molesto pero si intrigado por saber qué tanto sabía de mi. -solo me menciono que tienes una ex pareja problemática, y que cuide de ti. ¿Sabes? Al inicio no entendí porque me pidió eso, pero ahora... creo que puedo entender un poco.
-Él es un acosador, probablemente por eso Sun Hee te dijo algo como eso. -confesé avergonzado.
-Yo... no estoy seguro de si puedo preguntarte que paso entre ustedes o si me estoy metiendo demasiado en tu vida. Quiero aclarar que no soy un chismoso pero si... me considero tu amigo, sunbae. -bastaba solo escucharlo para saber que era honesto y al mirarlo lo confirmaba, él solo estaba preocupado por mi.
-Es una larga historia... -dije sin ánimos de recordar y comentarle mi historia amorosa con Jae Hyun, pero pronto cómo lo miré largue un suspiro rendido. -pero supongo que tengo el tiempo suficiente para contarte que ha pasado. ¿Tenemos mucho para caminar?
-Podemos dar una vuelta al parque e ir para casa de mientras, yo quiero escucharte.
Entonces me preparé para contarle, era la primera vez que lo hacía...
-Bueno, conocí a Jae Hyun hace un tiempo, antes de navidad y todo eso. Nos conocimos de una manera extraña porque él acababa de terminar con su novio y yo acababa de ser rechazado por un chico que me gustaba entonces simplemente nos cruzamos ese día y fue un click de inmediato. -suspiré sintiéndome estúpido al recordar ese momento en que lo conocí, porque yo estaba llorando bajo la nieve de invierno en el centro comercial y nos chocamos en el peor momento de ambos. -Ahora que lo pienso, creo que ninguno de los dos estaba preparado para empezar de nuevo tan pronto. Pero bueno... ese día él pidió mi número y comenzamos a mensajearnos. Desde el inicio fue muy coqueto conmigo pero yo no sabia que el era heterosexual y mh... Empezó a pedirme fotos y esas cosas. Fui tonto pero también caí en esa adrenalina de hacer algo malo o travieso.
Luego empezamos a tener citas y él se comportaba super dulce y hermoso, pero yo no sabía que esa no era su verdadera cara. -Me ponía nervioso que Young Soo no dijera nada entonces hice una pequeña pausa para mirarlo.
-Oh... sigue sunbae, te estoy escuchando. No quiero interrumpir. -murmuró apenado, sabía que me estaba prestando atención pero era nuevo para mí soltar mis penas en voz alta.
-Pero... si deseas decir algo, no me enojaré si me interrumpes ¿si? -él solo asintió como buen niño invitándome a continuar. -Bueno como te decía... yo no sabia que me estaba mintiendo, es decir, que solo creo esa linda personalidad para mi.
Al tiempo me enteré que yo era el primer chico que le gustaba y me sorprendí, pero me sentí especial, no dudaba de él. La pesadilla empezó cuando empezamos a salir... porque no tardó mucho en pedirme que sea su novio y así acostarse conmigo.
A mi me gustaba entonces no lo vi como algo malo pero no pasó ni una semana que empezó a desconfiar de mí y me pedía que me alejara de amigos. Él me hacía escenas de celos si sabía que debía hacer un trabajo de universidad con otros hombres. ¿Sabes? Sé que no soy la mejor persona del mundo pero nunca le di motivos para que me celara de esa manera. -froté mi frente con una de mis manos intentando aliviar mi mente, recordarlo me ponía nervioso. -No se porque no me di cuenta que tuve que terminarlo en ese momento... pero me quede y soporte su violencia verbal convenciéndome que cambiaría y que él necesitaba de mi ayuda para aliviar sus ataques de ira. Porque él era muy violento conmigo y luego me pedía perdón diciéndome que no era su intención, que me necesitaba para ser mejor persona.
-Me da rabia imaginarme todas las cosas que te habrá dicho...
-Si bueno... ya para el segundo mes comenzó a ser violento físicamente. No me golpeaba como tal pero me apretaba tan fuerte que me dejaba hematomas o me empujaba.
Una vez por celos me forzó a tener relaciones con él cuando yo no quería porque estaba cansado, y esa vez me golpeó... él se excusaba de que era sexual porque ammm... la cosa es que yo no quería y no le importo. Lloré mucho y tenía miedo porque él me decía que si lo dejaba haría de mi vida un desastre... y yo le creía porque después de ver su peor cara sabía que era capaz de hacerme aun mas daño.
No sabía cómo escapar pero para mi buena suerte él encontró a una "buena mujer" y terminó conmigo antes de que yo lo hiciera. No sin antes decirme que le daba asco por ser hombre y todo lo que dice un hombre hetero homofóbico... No tengo ganas de recordar eso. -quería llorar pero tenía que ser capaz de dejarlo ir todo. -Estaba aliviado cuando él terminó conmigo pero no todo terminó como quería. Aun cuando él estaba con alguien más comenzó a acosarme... y yo trabajaba en una tienda cerca de su departamento, tuve que renunciar de inmediato porque me sentía en constante peligro.
No era justo, pero tenía que hacerlo porque me mandaba audios amenazando con golpearme si me veía con otro hombre, cambié mi número de teléfono y todo. Por suerte, como duramos poco tiempo no conoce mi casa, tampoco conocía mi universidad pero si sabia donde estaba estudiando. Me costaba salir de casa solo, entonces Seung Hwa y Sun Hee me acompañaban a todas partes... No se como hizo para encontrarme, tampoco se porque quería llevarme con él pero yo no quiero volver a verlo nunca más.
-Él no te hará daño de nuevo... no dejaremos que eso pase.
Quería creer pero el miedo que implantó Jae Hyun en mí era muchísimo más fuerte que las palabras de Young Soo. Sin embargo, en el fondo de mi corazón brotaba esperanza gracias a él.
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