Sentía el agua de su trompa caer sobre su cabeza, el calor de la Savannah africana era calmado conforme las gotas de agua, que su madre le lanzaba por medio de su trompa, caían en su gris y pelada cabeza. Con dos metros de altura, aquel Elefante bebé se acercaba a su madre tocando una de sus potentes patas con el lomo de su cuerpo. La mirada que ambos se dedicaban mutuamente podía representar todo el cariño del mundo en una sola imagen. Thumber debía contar con un año de nacido; pero en ese año él ya creía conocer uno de los secretos más importantes dentro del mundo que los rodeaba, un secreto que a varios miembros de su propia manada le costó y costaba todavía poder descubrir: el amor era el secreto para la paz interna como también el combustible que hacia al mundo girar. Siendo una simple cría de elefante, Thumber, podía ver aquella verdad en los ojos de su madre mientras la sentía muy en su interior. El secreto de la creación era el amor, todo lo demás podía ser secundario e innecesario. El agua que salía de la trompa de su madre golpeó un poco su ojo derecho obligándolo a cerrarlo por un solo minuto. Largando una risa gruesa, Thumber, solo se limitó a continuar al lado del regazo de su madre recibiendo el agua que ella absorbía por medio de su trompa, lanzándola sobre la cabeza de su hijo refrescándolo de ese calor abrazador. Esa imagen de madre e hijo podría haber conmovido el corazón de varios transeúntes que pasaran por allí y se toparan con esa hermosa imagen; pero en el caso de un británico cazador furtivo con varios años de experiencia, aquella imagen solo le decía que tendría el marfil de los colmillos de aquella elefante junto a una cría que vender al zoológico dentro del mercado negro. Muchos coleccionistas de especies exóticas o propietarios de zoológicos de dudosa reputación pagaban muy bien por especies grandes como el Elefante. Aquello era un dos por uno que no pensaba desperdiciar. Apuntando con su rifle, aquel cazador de piel blanca con barba gris, como lo era su cabello, con un ojo blanco debido a un disparo que recibió durante la primera guerra mundial donde casi muere, disparó a su objetivo.

El agua que caía por su cabeza cambio repentinamente a sangre y Thumber observó horrorizado como su madre caía muerta al suelo mientras que un humano de tez blanca, siendo acompañado por varios hombres de tez oscura que llevaban lazos junto a una red, se acercaba a donde él estaba. Pronto, aquel pequeño Elefante, conocería otras emociones que le harían dudar de cuan efectivo era el amor en realidad a la hora de mover el mundo.